Más escrúpulos que mamá tortuga

 

Columna de Humor de Miles Mathis

Mi madre está enfadada conmigo. Cree que gasto demasiado dinero en comida. "Con lo que gastas comiendo fuera a diario", dice, "podrías haber criado a seis nietos, o sea, niños". Cuando le digo que esos niños no podrían vivir con lo que tengo en la nevera (fotoquímicos y recuerdos de fiestas de 1998) como yo, no puede evitar gritarme que quizá podría ir al supermercado o alguna locura por el estilo. Pero el problema es que voy , pero no me animo a comprar nada. Y es culpa suya. Al fin y al cabo, me enseñó a leer. Me enseñó a escuchar a los médicos. Me llevó al alergólogo.

Soy alérgico a todo. A todo ... en serio... al trigo, al maíz, al agua, al oxígeno. Por ejemplo: quiero comprar una barra de pan. Bueno, he aprendido a ignorar la alergia al trigo: solo era un 9 en una escala de 10, y una tortuga tiene que comer algo. Pero el maíz era un 10, así que me gustaría evitarlo. También el aceite de soja. He leído que es malo. Muchos pesticidas, trabajadores agrícolas pobres, mariposas muertas y aviones derribados. No sé. No se puede comprar nada con la conciencia tranquila.

Para empezar, todo lleva jarabe de maíz de alta fructosa. Bebidas de frutas, refrescos, galletas, todo. Brillo de labios, champú, zapatillas, todo. El lobby del maíz debe pagar a cada nuevo fabricante en EE. UU. un subsidio para incluir jarabe de maíz en su producto. Se paran contra la pared afuera de la oficina de patentes y dicen: "Psst, oye, amigo, he oído que tienes un nuevo (digamos) escudo térmico para el transbordador espacial. ¿Alguna vez has considerado ponerle un poco de jarabe de maíz? Nadie lo sabría excepto tú y yo".

Para qué una hogaza de pan de trigo necesita jarabe de maíz, no lo sé. Por lo que tengo entendido, solo se necesitan unos tres ingredientes para el pan. En mi supermercado local, en el medio acre dedicado a productos de pan, ninguno estaba hecho sin aceite de soya o jarabe de maíz de alta fructosa. Ninguno tenía una lista de ingredientes que le hubiera tenido sentido a mi abuela.

Y luego leí que demasiado flúor era malo para ti. Nuestra agua ya está fluorada, así que pensé en comprar una pasta de dientes sin flúor. No. No puedo. Puedes tener una pasta de dientes con flúor con 50 ingredientes raros, en un tubo de plástico, en una caja de cartón, envuelta en plástico, o puedes hacer gárgaras con agua, idiota. Ah, y tu agua tiene MTBE. Y el agua embotellada está toda en botellas de plástico que filtran toxinas e imitan las hormonas, y así sucesivamente. O puedes comprar el agua en una botella de vidrio, si empeñas tu reloj primero.

Además, vi en mi pasta de dientes que, si te tragas un poco, debes llamar inmediatamente a Control de Envenenamiento. Pensé: «Dios mío, me estoy cepillando los dientes con veneno». ¡Menuda tentación! Es como usar granadas de mano como esponjas. Un minuto estás en la bañera, puliéndote los pies (esas cosas ásperas en el lateral de la granada realmente despegan la piel seca), y de repente, ya está. El pasador se enganchó en el tirador del desagüe y todo se acabó. Cuando vives solo, tienes que pensar en estas cosas.

Pero, en serio, ¿qué clase de gente civilizada se cepilla los dientes con veneno? Gente muy segura de sí misma, supongo. La pasta de dientes dice que debo supervisar a los niños pequeños cuando se cepillan. ¿Pero qué tal si me salto un paso y simplemente no les doy veneno para cepillarse desde el principio? ¿Es solo una imprudencia?

Supongo que no soy muy buena consumidora. Me da miedo comprar cualquier cosa. Me da miedo no saber qué hacer con ella cuando termine. Me siento muy culpable por la basura. Me da miedo que algún animalito inocente con ojos grandes y tristes se meta en esa caja de cereales que no pude reciclar y le dé una claustrofobia terrible. O que una simpática ballena bebé que ni siquiera llegó a ver a su papá nade en esa bolsa horrible que acabo de traer de la tintorería y no le guste nada. ¿Por qué no pueden darte las cosas sin cajas ni bolsas? ¿De verdad están tan sucios los coches de la gente que no pueden volver a casa de la tintorería sin arruinar la ropa? Seamos sinceros, la gente con botes de mayonesa abiertos y montones de pelos de perro por todo el asiento trasero no es la misma gente que se almidona los trajes.

Pero mi madre sigue enfadada. Tiene que decir: «Ah, y supongo que en esos restaurantes solo usan agua bendita y pan sin levadura, ¿y no tienen cajas ni bolsas?». No sé qué usan. Me da miedo preguntar. Me temo que sean sinceros y digan: "Mira, amigo, ¿qué quieres por diez dólares, comida de verdad? Tenemos que apoyar la economía. ¿Qué quieres hacer, dejar a la gente sin trabajo, miserable gusano sin compasión?". Así que vivo en la negación. Intento pedir productos orgánicos cuando puedo, pero la mayoría de las veces eludo la responsabilidad. Iba a hablarte de las pasas, pero ahora mismo son demasiado para mí.

En un montón,

sobre un tronco,

sobre el agua,

el tercero desde abajo,

escondiendo mi propio caparazón duro,

Tom Turtle.